A esta ruta no pude asistir, pero gracias a la colaboración de Pablo que me envió el texto y las fotos la podemos describir en nuestro Blog para su divulgación.
Se tuvo que variar la ruta, porque el camino que iba para Pétrola estaba inundado por las lluvias del pasado fin de semana.
Comenzamos en Corral-Rubio, por delante un camino recto entre campos de cereales, y algo de vientecillo un poco fresco, y la amenaza de lluvia que no callo; a lo lejos se veían las lagunas a rebosar de agua de Corral-Rubio. Nos adentramos en el monte por las casas del Recreo, contemplamos hermosas encinas, y nos quedamos sorprendidos por la cantidad de bolitas rojas que tenían las coscojas, eran agallas producidas por un insecto, que antiguamente se sacaba un tinte rojo para teñir las capas de los romanos.
Seguimos nuestro camino y llegamos a la Laguna de la Campana, laguna un poco escondida y que poco se sabe de ella por estar entre sierras, y pertenecer al término de Chinchilla. Maravilloso espectáculo de agua, tierra y toda clase de aves que nos deleitaron en los minutos que estuvimos degustando nuestros ágapes. Estuvimos mirando con nuestros prismáticos (quien lo había traído), descubriendo los primeros flamencos al fondo de la laguna, visita inesperada de la guardería que se le atendió como es debido.
Seguimos nuestra ruta, y nos encontramos con las carriladas antiguas de los romanos que con el paso de los carros de llantas de hierro, habían tajado la roca. Seguimos ya el último tramo del camino también muy recto, y con un poco de barro hasta llegar al pueblo.
En el pueblo visitamos la Laguna Grande que estaba a rebosar de agua y de anatidas entre las destacadas más de 80 flamencos, esto nos colmo de alegría y nos invito a descansar, tomando asiento para contemplar el maravilloso espectáculo vivo de la vida. Nos adentramos por las calles hasta el centro donde estaba la iglesia de San Miguel, vimos algunas placas que nos llamaron la atención, después de tantos años (Alguien dijo), y desde allí al lavadero antiguo donde nos estaba esperando el autobús. Nos fuimos por la carretera de Pétrola divisando ya sentados, la cantidad de lagunas, hoyas y sembrados anegados de agua. En Pétrola parada para tomar un café. Otra vez en el autobús, adentrándonos por la carretera que nos llevaría a nuestra querida Albacete.
Texto y fotografias video de Juan Pablo López Aracil. Monitor
VIDEO DE LA RUTA
PLANO TOPOGRAFICO DE LA RUTA (pincha en el plano para ampliar)